El ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, negó ayer que la República Dominicana haya regalado parte del mar Caribe en el Acuerdo de Delimitación Marítima firmado con el Reino de los Países Bajos, como se difundió en los medios de comunicación.
En cambio, afirmó, durante una rueda de prensa en la Cancillería, que la República Dominicana ganó 11 millas náuticas cuadradas (37 kilómetro cuadrados), en el acuerdo rubricado el pasado el 5 de julio de 2021, pieza que hace 15 días recibió el voto favorable del Tribunal Constitucional (TC) y que deberá ser conocida en el Congreso Nacional.
“Eso es falso de toda falsedad”, declaró el ministro, al hacerse acompañar de una comisión de notables que estudió y verificó el acuerdo entre los que figuran el ministro de Defensa, Carlos Antonio Fernández Onofre; el vicealmirante de la Armada, Agustín Morillo Rodríguez y el director de la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos (Anamar), Jimmy García, entre otros.
El documento al que hace referencia el canciller establece que las delimitaciones de todas las zonas marítimas fueron trazadas en base a la equidistancia, o igualdad de distancia entre los puntos, y será la línea geodésica, o mínima, formada por los puntos identificados por sus coordenadas geográficas expresadas en el sistema de referencia World Geodetic System de 1984.
El partido Fuerza de Pueblo había denunciado que la firma de este acuerdo marítimo es violatoria a la soberanía nacional.
“Esas personas que andan diciendo eso, no saben de lo que están hablando y le están haciendo un flaco servicio a nuestra democracia”, subrayó el funcionario visiblemente preocupado.
Álvarez dijo que luego de que el Tribunal Constitucional declaró “conforme a la Constitución” el acuerdo, ahora corresponde al presidente Luis Abinader decidir en qué momento lo enviará al Congreso para su aprobación.
“No había ninguna circunstancia anómala geográfica que variara la equidistancia y tampoco había desproporción en los mares internos que cada uno había adquirido, por lo tanto, la única manera equitativa, era la equidistancia”, señaló Álvarez, al sostener que los tratados internacionales son vinculantes y obligatorios.
Agregó que, si cada país fuese a tratar de establecer sus propios límites, sería la ley del más fuerte. “Y nosotros estamos rodeados de países un poquito más fuertes que nosotros, por lo tanto, en República Dominicana, nos interesa fortalecer el multilateralismo y el derecho internacional, porque sin eso estaríamos perdidos”, expresó el funcionario.
Según las palabras del Canciller, no hay ninguna agenda oculta detrás de este acuerdo, sino que el motivo estaba sustentado en que el país ya había negociado un Acuerdo de Delimitación Marítima con Venezuela y Colombia, por lo que, en la frontera sur solo quedaba los Países Bajos.